Otro paso en la lucha contra los abusos de las AFP. Por Ricardo Hormazábal S. Abogado y Presidente de ACUSA AFP

Los dueños de las AFP y el gobierno han señalado que se hace necesario aumentar las cotizaciones de los trabajadores, a lo cual nosotros nos oponemos, replicando que, tal como se hace en todo el mundo, debe incorporarse el aporte patronal.

 

El lunes 1 de octubre de este año comenzó a sesionar la Comisión Especial del Senado que esa Corporación acordó crear en enero de este año, y cuyo objeto es el estudio de Reformas al sistema de administración de fondos de pensiones. 

 

Integran esta importante Comisión, la senadora Ximena Rincón y los senadores Tuma, que la preside, Bianchi, Gómez, Kuschel, Muñoz, Navarro y Uriarte. 

En esta ocasión expusieron, entre otros, el Subsecretario de Previsión, Augusto Iglesias, los representantes de la CUT, el economista Klaus Hebel, asesor de las AFP, Gonzalo Cid de CENDA y el autor de este artículo. 

El subsecretario, que ha trabajado con las AFP buena parte de estos 30 años, se limitó a repetir que el sistema funciona muy bien, que no ofrece nada, como de de manera irresponsable lo hacía el sistema antiguo, y que todo depende de los aportes de los trabajadores y de la rentabilidad de las inversiones. 

Se planteó una pregunta ¿De dónde surgen las interpretaciones que señalan que se obtendrían pensiones con un alto porcentaje de la última remuneración? Ni una palabra sobre las millonarias pérdidas, los altos costos y las maniobras dolosas con nuestros Fondos. 
Al intervenir, recordamos que esas promesas fueron hechas por José Piñera al imponer el sistema de AFP, repetidas por el mismo Piñera en 1991 en su libro El Cascabel al Gato y retomadas por el Presidente de las AFP Guillermo Arthur el año pasado, como lo hemos demostrado en numerosos artículos y en los dos libros que hemos escrito sobre el tema. 

El señor Hebel, junto con señalar datos técnicos que en su opinión validaban el sistema, reconoció que la organización del trabajo, "Mercado Laboral" como lo llaman los liberales, generaba baja densidad de cotizaciones. 

Basados en principios humanistas y cristianos, nosotros siempre hemos rechazado considerar al trabajo humano como otra mercancía, pero más allá de la diferencia doctrinaria, es verdad que el liberalismo ha producido un trabajo precario que se traduce en que las personas trabajamos, en promedio, sólo la mitad de nuestra vida con contratos imponibles, lo que repercute negativamente en nuestras pensiones. 

Nosotros coincidimos con ese punto y por ello somos decididos partidarios de cambiar el enfoque de nuestra organización económica, fortaleciéndola frente a los nefastos efectos de la organización mundial de la economía. 

Los dueños de las AFP y el gobierno han señalado que se hace necesario aumentar las cotizaciones de los trabajadores, a lo cual nosotros nos oponemos, replicando que, tal como se hace en todo el mundo menos aquí, debe incorporarse el aporte patronal. 

El economista Hebel hizo presente que, en su opinión, es vital incrementar los aportes para la previsión y que ellos deben provenir de los empleadores no de los trabajadores, enfatizando este aspecto de manera muy clara, lo que valoramos altamente. 

Este primer encuentro demuestra que las personas que toman en serio sus tareas pueden encontrar puntos de concordancia, aunque el sello ideológico en el terma previsional es y será muy fuerte, ya que los liberales están en los tecnócratas concertacionistas, con gran influencia en los 4 gobiernos de esta coalición y en la derecha. Pero los hechos son más porfiados que los dogmas económicos. En un próximo artículo nos referiremos específicamente al tema del Daño Previsional. Por ahora transcribiremos lo que pedimos a la Comisión senatorial para el corto plazo. 

MEDIDAS URGENTES DE CORTO PLAZO.

1.-Pedir nueva ley similar a la 19.200, otorgando el derecho de escoger libremente entre seguir en las AFP o volver al sistema antiguo;

2.- Flexibilizar normas para independientes, en un par de años será obligatorio imponer por el total de los ingresos percibidos, lo que no considera las inversiones de los profesionales independientes que han contratado seguros privados en chile o el exterior;

3.- Rebajar exigencia de 70% de las remuneraciones promedios de los últimos 10 años para quienes están sin empleo y tienen ahorros suficientes para financiar una pensión superior al 150% de la pensión mínima;

4.- Dictar nuevas normas penales para castigar con penas de cárcel efectivas a los que usen indebidamente los fondos de los trabajadores destinados a la seguridad social;

5.- Establecer que solo se podrán cobrar comisiones sobre las ganancias de los fondos;

6. Crear una AFP del estado, no del BancoEstado;

7.-Prohibir las donaciones de fondos de las AFP o de las empresas en que ellas invierten a los partidos y candidatos en todo tipo de elecciones;

8.-Eliminar el descuento del 7% para salud de los jubilados que vuelven a ser trabajadores dependientes, igualando la situación con la cotización para las AFP, la que puede evitarse a pedido del trabajador;

9.- Crear una comisión de usuarios por cada AFP;

10.- Indemnizar a los trabajadores afiliados a las AFP por las pérdidas de los fondos;

11.-Restablecer el aporte patronal, el que como es usual, se consideraría un gasto para producir y por lo tanto se deduciría de impuestos;

12.-Hacer obligatoria la inversión de los fondos en Chile, para desarrollar armónicamente las regiones.

 
Es una gran oportunidad para que las personas e instituciones interesadas envíen sus opiniones a esta instancia y a todos los parlamentarios.

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12 propuestas por el fin del abuso en las AFP

Ricardo Hormazábal

El Senado está implementando un acuerdo de enero de este año, que aprobó la creación de una Comisión Especial para el “estudio de Reformas al sistema de administración de fondos de pensiones” presidida por el Senador Eugenio Tuma; la integran, además, la senadora Ximena Rincón y los senadores Bianchi, Gómez, Kuschel, Muñoz, Navarro y Uriarte.

En la sesión celebrada el lunes 1 de octubre, el subsecretario de Previsión repitió un discurso exitista sobre el sistema de AFP, que no se condice con publicaciones oficiales, estudios de expertos y noticias en medios de comunicación que ratifican que el promedio de las 940.000 pensiones que entrega el sistema al mes de agosto 2012, no supera los $177.000 mensuales, es decir, son inferiores al 40% de las remuneraciones promedio y al sueldo mínimo legal.

Tampoco se refirió al hecho que la Superintendencia de Pensiones, en Panorama Previsional de septiembre del presente, nos informa que cerca de 500.000 pensiones, en la modalidad de retiro programado, tienen un promedio de $ 121.000 mensuales, poco más que la pensión mínima.

El personero de gobierno, vinculado a las AFP desde la creación de éstas, señaló que no entendía porque las personas esperaban más, cuando el sistema se caracteriza por no ofrecer nada.

Pero él sabe que José Piñera, autor de la idea, sostenía año 1981 y luego en 1991 que las AFP entregarían una pensión equivalente a un 70% de la última remuneración, si es que se llegaba a un 4,2 % anual de rentabilidad. También conoce declaraciones del Presidente de la Asociación de AFP, Guillermo Arthur, quién afirma que las AFP han obtenido una rentabilidad superior al doble de lo estimado originalmente. las cifras oficiales desmienten esas estimaciones, pero la realidad es distorsionada por una propaganda engañosa muy fuerte en todos los medios de comunicación.

El gobierno, los dueños de AFP y algunos de los expertos que trabajan para ellas han insistido en que la solución pasa por subir los aportes de los trabajadores, propuesta que es rechazada tajantemente por nosotros, las víctimas de estos abusos.

Nosotros concordamos en que hay que poner más fondos, pero que ellos deben ser aportados por los empleadores, como ocurre en todo el mundo civilizado y que empezó a restablecerse con la Reforma del 2008, de la ex Presidenta Bachelet, que permitió que el Seguro de Invalidez y Sobrevivencia fuera pagado por los empleadores, lo que significó disminuir el costo para los trabajadores en un 1,4% de las remuneraciones.

Las AFP no se opusieron, porque ellas siguieron recibiendo lo mismo, en total más del 25% mensual de lo que aportan lostrabajadores y los patrones.

Un hecho destacable producido en la Comisión senatorial fue escuchar a un experto pro AFP, el economista Klaus Hebel el que se manifestó de acuerdo con la idea de que el mayor aporte debía provenir del aporte empresarial.

Las 12 propuestas de Acusa AFP

1.-Dictar una nueva ley, similar a la 19.200 de 1993, dando libertad a los afiliados de AFP para escoger entre seguir en ellas o volver al sistema antiguo.

2.- Modificar la rigidez de la ley actual que establece la obligatoriedad de la cotización de los independientes por el total de sus ingresos.

3.- Bajar al 50% la exigencia de 70% de las remuneraciones promedios de los últimos 10 años para facilitar la jubilación anticipada de personas cesantes y que disponen de fondos para financiar una pensión superior al 150% de la pensión mínima.

4.-Castigar con penas de cárcel efectivas, sin derecho a la libertad provisional, a los que usen para sus propios intereses los fondos de los trabajadores destinados a la previsión y la salud.

5.- Modificar la ley para que las AFP sólo puedan cobrar comisiones cuando los fondos registren ganancias.

6. Crear una AFP estatal.

7.-Prohibir a las AFP y a las empresas en que ellas invierten hacer donativos a los partidos y candidatos en todo tipo de elecciones.

8.-Poner fin al descuento del 7% para salud de los jubilados que vuelven a imponer, tal como ocurre con la cotización para las AFP.

9.- Hacer participar a los afiliados creando una comisión de usuarios por cada AFP.

10.-Obligar a las AFP a indemnizar a los trabajadores afiliados a las AFP por las pérdidas de los fondos.

11.- Incrementar el actual aporte patronal, extendiéndolo para todo tipo de pensiones.

12.-Obligar a las AFP a invertir los fondos de pensiones en Chile, para colaborar al desarrollo justo de todas las regiones.

Esperamos que en esa instancia de diálogo creada en el Senado, pueda ser replicada en la Cámara de Diputados y que las demandas de los afiliados sean escuchadas por el gobierno, que tiene la iniciativa exclusiva en estas materias.